Malala Yousafzai

 

PAKISTAN – 1997

Autora del texto: Marta Lago Fernández

 

“Un niño, un profesor, un libro y una pluma pueden cambiar el mundo. La educación es la única solución”. (Discurso ante la ONU).

Malala Yousafzai es una defensora de la educación paquistaní que, a los 17 años en 2014, se convirtió en la persona más joven en ganar el Premio Nobel de la Paz.

Nació el 12 de julio de 1997 en Mingora, Pakistán.  Fue la primera de tres hijos nacidos de Ziauddin y Tor Pekai Yousafzai. Su padre, maestro y director de una escuela, era un gran defensor de la educación. Dada su influencia, Malala mostró una gran pasión por el conocimiento desde una edad muy temprana. Sin embargo, en 2007 los extremistas talibanes comenzaron a tomar el control del valle de Swat vulnerando, entre otros, el derecho a la educación de las niñas.  A los once años, Yousafzai decidió enfrentarse a los talibanes.

Yousafzai comenzó blogueando anónimamente para la BBC a principios de 2009. En su blog relataba el sufrimiento que provocaban los talibanes. Pronto, Yousafzai y su familia se vieron obligados a abandonar su hogar debido al aumento de las tensiones entre Pakistán y los talibanes.  Esto no impidió que Yousafzai abogara por su derecho a asistir a la escuela.  En los años siguientes, ella y su padre comenzaron a hablar en los medios de comunicación a favor de la educación de las niñas.  Hicieron campaña por el acceso de las niñas pakistaníes a una educación gratuita y de calidad.  En 2011, Yousafzai fue nominada para el Premio Internacional de la Paz de los Niños/as.  Aunque no ganó, ese mismo año ganó el Premio Nacional de la Paz Juvenil de Pakistán, convirtiéndose en una influyente figura pública.

El 9 de octubre de 2012, Yousafzai estaba en el autobús regresando de la escuela cuando fue abordada por  los talibannes. Recibió tres disparos, uno de ellos en la cabeza. Afortunadamente, fue transportada en avión a un hospital militar paquistaní y luego llevada a una unidad de cuidados intensivos en Inglaterra. Contra todo pronóstico sobrevivió al atentado.  En marzo de 2013, Yousafzai comenzó a asistir a la escuela en Birmingham.  Aunque ahora podía asistir a la escuela en Inglaterra, decidió seguir luchando «hasta que todas las niñas pudieran ir a la escuela”.  En su decimosexto cumpleaños, Yousafzai habló en las Naciones Unidas en Nueva York: “Pensaron que una bala nos callaría, pero fracasaron. Nada ha cambiado en mi vida, excepto esto: las debilidades, el miedo y la desesperanza murieron. Nacieron la fuerza, el poder y el coraje”.  Ese mismo año publicó su autobiografía titulada “Yo soy Malala : la joven que defendió el derecho a la educación y fue tiroteada por los talibanes”. Además, fue galardonada con el Premio Sájarov a la Libertad de Conciencia del Parlamento Europeo por su activismo.

En 2014, Yousafzai y su padre establecieron el Fondo Malala para apoyar y defender internacionalmente a las mujeres y las niñas.  A través de su organización benéfica, se reunió con refugiados sirios en Jordania, jóvenes estudiantes en Kenia y habló en Nigeria contra el grupo terrorista Boko Haram que secuestró a niñas para impedirles ir a la escuela.  En diciembre de 2014, Yousafzai recibió el Premio Nobel de la Paz por su trabajo.  A los diecisiete años, se convirtió en la persona más joven en ser nombrada Premio Nobel.  Desde entonces, Yousafzai ha continuado abogando por los derechos de las mujeres y las niñas.  El Fondo Malala promueve la educación de calidad para todas las niñas mediante la financiación de proyectos educativos a nivel internacional, la colaboración con líderes mundiales y defensores locales y la puesta en marcha de estrategias innovadoras para empoderar a las mujeres jóvenes.